
Chiquito de la Calzada y otros casos de ‘big in Japan’
Cultura -

Resulta sorprendente la cantidad y, sobre todo, la variedad de artistas españoles que han triunfado más en Japón que en su propia casa.
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Rosalía, fenómeno de masas en Japón
Desde que se publicase el tercer disco de Rosalía, Motomami, se está hablando mucho de la influencia de la cultura japonesa en el trabajo de la catalana, aunque en el imaginario asiático ya se había manifestado antes durante su carrera.
Rosalía se ha declarado fan de series de manga como Sailor Moon e incluso se le ha visto en redes sociales aprendiendo a hablar en japonés. Muchos de sus seguidores consideran que es parte del colectivo “otaku”, con Akihabara como centro neurálgico, uno de los barrios de visita obligada en Tokio.
Ya antes del “Chicken teriyaki”, la cantante era famosa en Japón, donde a veces se la ha presentado como “la princesa flamenca”. Nombre artístico que demuestra el fenómeno global en el que se ha convertido la de Sant Esteve Sesrovieres (municipio de Catalunya). Rosalía es uno de esos artistas españoles que triunfan a nivel internacional más allá de Europa y América Latina. Rosalía es universal y, por eso mismo, no se puede considerar que sea big in Japan.

‘Yōgaku’ y el concepto del big in Japan
La palabra yōgaku se utiliza en Japón para referirse a la música no japonesa, principalmente la que procede de Estados Unidos y Reino Unido, pero no únicamente. En esa categoría entran muchos géneros y subgéneros que, en ocasiones, pasan desapercibidos en sus países de origen y encuentran en Japón un inesperado nicho de mercado.
Por otro lado, la expresión inglesa big in Japan se refiere a artistas o bandas que son muy conocidos en el país nipón, pero apenas han tenido éxito en su país o es un éxito relativo en comparación con el que han logrado entre el público japonés. A menudo se utiliza medio en broma, para burlarse de alguien al que “no conoce ni el tato”, aunque se las dé de popular e importante.
También existe (desde los años 80 debido al escaso éxito de AC/DC en Japón) la expresión “small in Japan”. En este caso, se trata de artistas que, pese a la promoción y gran éxito en otras partes del mundo, por lo que sea, no triunfan en Japón. El ejemplo que siempre se utiliza hoy en día es el de la cantante Adele, que de big in Japan no tiene nada.
Chiquito de la Calzada y otros flamencos en Japón
Si hay un género dentro del yōgaku que ha sido big in Japan es el flamenco.
En los años 60 y 70 no fueron pocos los artistas de flamenco que viajaron a Japón, donde podían vivir de su profesión -en condiciones a veces penosas, eso sí- y ganar algo de dinero con su música, algo que no podían hacer en España ni en ningún otro país.
Paco de Lucía, Pepe Habichuela, José Mercé, el bailaor Antonio Gades… todos ellos pasaron temporadas en tablaos japoneses donde vivieron multitud de anécdotas que se recogen en el libro Un tablao en otro mundo, de David López Canales.
Algunos de aquellos flamencos acabaron teniendo éxito también en España, otros desaparecieron en el olvido. Lo curioso de Chiquito de la Calzada es que fue uno de los que emigraron para descubrir el flamenco a los japoneses, pero él volvió para acabar convirtiéndose en uno de los cómicos más recordados de España en las décadas finales de siglo XX e inicios del XI.
Chimo Bayo tirando ‘Bombas’ en el Tokyo Dome
Como Chiquito, Chimo Bayo es todo un icono de la cultura popular en España. Pero también lo es en Japón.
El mito de la Ruta del Bakalao, con nombre y apellido muy fáciles de pronunciar para los japoneses, fue uno de los poquísimos artistas europeos de música electrónica que consiguió actuar frente a miles de japoneses en los años 90. Fue en el mítico Tokyo Dome, el mayor estadio de beisbol de un país que adora ese deporte, incluso más que el sumo.
Chimo Bayo, que había sido número 1 en Japón con “Así me gusta a mí”, actuó el 7 de agosto de 1993 en el festival Avex Rave ante unas 50.000 personas. Y lo mejor es que hay testimonio gráfico de ello.
Triunfar en Japón… cantando en japonés
El de Airii Yami sí que es un fenómeno puramente big in Japan, porque estamos seguros de que son pocos los nacionales que conocen el nombre artístico de la andaluza María López Machado.
Cuando era apenas una adolescente, esta joven cantante, que ya tiene grabados varios discos, participó en varios programas de la televisión japonesa. Por entonces se llamaba Yami Tabby y consiguió maravillar al jurado del talent show de anime más popular de Japón. En el Haneda International Anime Music Festival, su actuación fue vista por el 46% de la audiencia en Japón. De ella también hay documento gráfico que da fe de que lo de big in Japan no es una manera de hablar.